G+
Un
equipo de la Universidad de Oviedo, dirigido por el catedrático de
Bioquímica y Biología Molecular Carlos López-Otín, en colaboración con
el Instituto Josep Carreras y las universidades de Barcelona y Harvard
(EE.UU.), ha identificado un nuevo mecanismo molecular alterado durante
el envejecimiento. Este descubrimiento, publicado en la revista Nature Cell Biology,
les ha permitido desarrollar un tratamiento que duplica la esperanza de
vida de ratones con envejecimiento acelerado. El artículo, además, fue seleccionado para ocupar la portada del número de agosto de esta
prestigiosa revista.
Los investigadores se centraron en el estudio del proceso de reprogramación celular, que facilita la transformación de células adultas en células madre inducidas (iPS), capaces de generar cualquier tipo celular del organismo. El proceso de reprogramación implica el rejuvenecimiento celular y requiere la eliminación de las alteraciones moleculares y celulares asociadas al envejecimiento. Sin embargo, la reprogramación de células procedentes de pacientes con envejecimiento acelerado o de individuos de edad avanzada es muy ineficiente debido a las múltiples alteraciones acumuladas en sus células. Por ello, el objetivo inicial de este trabajo consistió en identificar las alteraciones presentes en las células de pacientes con los síndromes progeroides de Néstor-Guillermo o Hutchinson-Gilford, que recapitulan fielmente muchas de las alteraciones asociadas al envejecimiento normal.
“El
estudio de estas patologías presenta un gran interés biológico por las
claves que pueden proporcionar acerca del envejecimiento normal y por la
posibilidad de ensayar aproximaciones terapéuticas dirigidas a paliar o
a retrasar sus efectos”, señala López-Otín.
Los
expertos observaron que las células procedentes de estos pacientes o de
individuos de edad avanzada presentaban una hiperactivación de procesos
inflamatorios celulares. Sorprendentemente, “el tratamiento con
fármacos antiinflamatorios aumentó la eficiencia de la reprogramación
celular hasta niveles comparables a las células procedentes de
individuos jóvenes”, resalta José María Pérez Freije, codirector del
trabajo.
“Es
la primera vez que se relaciona la hiperactivación de rutas bioquímicas
de inflamación con los procesos de reprogramación celular”, apunta
Fernando G. Osorio, otro de los autores de este estudio.
Aplicaciones clínicas
Con
el fin de trasladar estos resultados hacia posibles aplicaciones
clínicas, los investigadores identificaron un componente esencial de la
respuesta inflamatoria implicada en este proceso, la proteína DOT1L.
Esta proteína tiene la capacidad de regular numerosos genes implicados
en el proceso de reprogramación celular y bloquea la formación de
células madre iPS.
Tras
administrar inhibidores de DOT1L a células humanas y ratones con
envejecimiento acelerado, observaron una mejoría extraordinaria de todos
los síntomas asociados al envejecimiento, así como un aumento de la
esperanza de vida de estos ratones de más del 65%.
Estos
resultados “superan ampliamente los obtenidos con las estrategias
terapéuticas desarrolladas previamente para el tratamiento de los
síndromes de envejecimiento acelerado sin presentar efectos secundarios
aparentes”, comenta Clara Soria-Valles, primera firmante del trabajo.
Este descubrimiento tiene sus antecedentes en trabajos anteriores de este grupo publicados en Nature, Nature Medicine, Cell y Science Translational Medicine,
en los que describieron diversos mecanismos implicados en el
envejecimiento acelerado y el desarrollo de las primeras terapias para
estos síndromes. Algunas de estas terapias se encuentran actualmente en
ensayos clínicos para el tratamiento de pacientes con envejecimiento
acelerado.
Puesto
que los inhibidores de DOT1L están siendo empleados para el tratamiento
de algunos tipos de leucemia, “es posible que se puedan ensayar en
pacientes con progeria en un futuro próximo, solos o en combinación con
otros agentes terapéuticos”, asegura Freije.
Este
trabajo “demuestra la utilidad del estudio de los mecanismos implicados
en la pérdida de plasticidad celular que acompaña al envejecimiento
para identificar nuevas dianas terapéuticas que permitan intervenir
sobre este proceso natural”, concluye López-Otín.
Fuente: Agencia Sinc, España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario